domingo, 29 de diciembre de 2019

Las horas distantes de Kate Morton

Me subestime un poco al pensar que no me iba a dar tiempo a terminar el libro antes de cambiar de año, y si que lo hice, y no solo me sobraron 3 días, sino que agregué con ello, una novela de más, a mi reto “un mes, un libro”.

Quiero comenzar esta entrada con una curiosidad sobre mis libros de 2019, se que esto debería haberlo tratado en el ranking pero tampoco queria hacerlo demasiado extenso, y ya que va a tener un anexo, creo que es buen momento para mencionar que casi todos ellos han girado sobre dos cuestiones principales:

1. La Guerra, tanto la Civil española ( “Las tres heridas” y la saga de “el Cementerio de los libros olvidados”), como la Segunda Guerra Mundial (“Las horas distantes”), y otras mucho más lejanas (“El sol bajo la seda”).

2. Los protagonistas están relacionados con libros, ya sea al ser los propios escritores (“Las tres heridas” , ” La Princesa de hielo” y los Blythe en las “Las horas distantes”), editores ( Edie en ” Las horas distantes” ) o libreros (El Cementerio de los libros olvidados”) . Quién sabe si tanto leer sobre la pasión de los demás hacia los libros, y como cada uno pone su granito de arena para que gente como yo pueda disfrutar de ellos, tanto hablarme sobre escribir, ha hecho crecer en mi esa necesidad de hacer mi aportación, que se ha materializado en este blog.

Otra curiosidad en cuanto a la interrelación entre los libros, aunque esta es mínima, no deja de sorprenderme que justo en el anterior uno de los protagonista fuese Goya, y el señor Blythe tenía uno de sus cuadros en su estudio, al que hacen referencia en más de una ocasión.

Ahora toca hablar de “Las horas distantes”, cuya sinopsis es la siguiente: ” Una carta perdida durante muchos años llega por correo y Edie Burchill se encuentra viajando a Milderhurst Castle, una mansión inglesa en la que viven las hermanas solteras Blythe y en la que se alojó su madre durante la Segunda Guerra Mundial, cuando era una niña de trece años. Las hermanas Blythe mayores son gemelas y se han pasado gran parte de su vida cuidando de su hermana pequeña, Juniper, que no volvió a ser la misma desde que su prometido la abandonó en 1941. En el interior del ruinoso castillo, Edie comienza a desenmarañar el pasado de su madre. Pero las piedras de Milderhurst esconden otros secretos, y Edie está a punto de descubrir más de lo que esperaba. La verdad de lo que ocurrió en las horas distantes del pasado lleva mucho tiempo a la espera de que alguien la descubra.

Para mi gusto es un libro excesivamente largo, donde lo único interesante empieza a pasar a partir del 85%. Está escrito con mucho gusto, un lenguaje cuidado y actual, pero la historia y los secretos del castillo no me han llegado a atrapar. Cuando la verdad empieza a salir a la luz, lo deja caer como cualquier cosa, y dos renglones más abajo la vida sigue; me recordó un poco a cuando leí el Señor de los anillos, varias hojas perdida con Legolas en el bosque disfrutando de las gotas de agua deslizarse por las hojas de los árboles y cuando por fín llega la batalla del Abismo de Helm, para Tolkien con una página era suficiente. Además la forma de tratar el final me estaba desesperando, porque Kate Morton decide explicar que pasó con Tom, el prometido de Juniper, después del desenlace de la historia de las vidas de las hermanas Blythe, que para mi, no deja de ser el desenlace del libro; y aún así, empieza a divagar con sueños de Saffy, que aunque en cierta medida tienen un motivo, a mi me estaba cansando tanto relleno, solo quería saber la verdad sin más rodeos.

Mi nota es un 5. No quiero suspenderlo porque al final ha cumplido su proposito, que no deja de ser entretener, pero realmente aprueba porque no me esperaba “esa verdad”.

En el ranking del 2019 lo pondría en el número 7, porque me engancho más la historia de mágia adolescente, y aunque es un libro largo como “El sol bajo la seda”, al menos éste me parecía bastante interesante durante la primera mitad.

Para el siguiente, nos pasamos al papel, “El oficio del vivir” de Cesare Pavese.

jueves, 19 de diciembre de 2019

Ranking de las lecturas de 2019


Mucho me temo que no voy a poder concluir antes de Nochevieja “Las horas distantes”, es extenso y diciembre es un mes de comidas, cenas y preparativos que nos ocupan mucho tiempo. Así que con la satisfacción de haber cumplido con mi propósito de un libro por mes, siendo el que me ocupa ahora mismo el gracia; procedo a exponer las posiciones que le he dado a cada uno.


Las tres heridas de Paloma Sánchez.

Porque es un libro que te llega al alma, a veces triste, a veces bonito, a veces tierno, a veces inesperadamente “sobrenatural” (esos toques me encantan). Una lectura recomendada para acercarnos a parte de la historia de este país que no deberíamos olvidar, pero si superar.


Volavérunt de Antonio Larreta.

No voy a extenderme mucho, ya que hice una reseña sobre él. Lo pongo el segundo porque me sorprendió y me fascinó a partes iguales. He dudado mucho si darle el primer puesto, pero al final ha ganado la sensación de ternura que te deja “Las tres heridas”.


La saga “El cementerio de los libros olvidados” .

La primera parte de la saga me la leí el año anterior, pero quiero tratarlos todos como un bloque. Les cogí mucho cariño a los Sempere, de hecho me dio pena, despedirme de los protagonistas y cerrar la historias de sus vidas, al menos de momento. Me ha encantado como el autor ha ido uniendo los personajes a lo largo de los libros, las “bombas” que ha ido soltando en cada uno de ellos, el segundo con ese ambigüedad entre lo sobrenatural o la simple locura, el humor y la labia a raudales de Fermín Romero de Torres… Pero se queda con la medalla de bronce porque la distribución de los libros me parece descompensada, “El prisionero del cielo” apenas tiene argumento o historia propia, parece la introducción a ” El laberinto de los espititus”, el cual es extenso de más, lo que hace que a veces se me antojase lento.

La princesa de Hielo (Crímenes de Fjallbacka 1).

Me gustó jugar a adivinar que oscuros secretos guardan las familias de este pueblo de Suecia, Acerté uno de tres. Aunque era muy, muy gordo, fallé el realmente importante, el/la asesino/a. Una lectura ligera que entretiene, estoy totalmente dispuesta a seguir con las novelas policiacas de Camila Lackberg, sino me equivoco son 10 y han dado lugar a una serie de 5 capítulos llamada “Los Crimenes de Fjallbacka”, por si alguien quiere ver la adaptación a televisión.


El Sol bajo la seda de Eric Marcha.

El resumen de este libro es “lo bueno si breve, dos veces bueno” La primera mitad genial, dinámico, las aventuras de un cirujano en la Edad Media, era interesante. Pero hay un momento crucial en la historia que, una vez anunciado, no es desvelado completamente hasta que no se avanza un 20% más en sus 600 página (haced las cuentas) y en adelante es darle vueltas a lo mismo, cual telenovela de medio día.


Crónicas de la Torre I (El valle de los lobos) de Laura Gallego García.

Aunque es un libro destinado a adolescentes, me lo leí en menos de una semana, supongo que la Ely de instituto sigue en mi, y a veces me apetecen lecturas sencillas, sin personajes con una carga emocial grande y tragedias que pesen sobre sus hombros, como en este caso; un poco de magia y unos elfos, y yo feliz. En 2020 tengo que encotrar un hueco para seguir la historia.


Los hechiceros del Tajo de Gerad de Villiers.

Epoca de la guerra fría, un libro de espías, que explica un poco como vivió Portugal todos aquellos años. Se deja leer, pero una vez concluido te deja indiferente.


El secuestro de Miss Blandis de James Hadley Chase.

Obra que le encubró a su autor en 1939, esta ambientada, en lo propio de la época, gangters con el gorro echado sobre los ojos, yendo de tipos duros con su “oye nena” y una violencia desmesurada. No entra dentro de mis gustos y me ví un poco obligada a leerlo por mis las largas esperas en los aeropuertos durante mi viaje a Venecia.


Crónica Sentimental en Rojo de Francisco Gónzalez Ledesma.

El argumento podría ser bueno y el giro argumental del final está bien, pero en general el libro no avanza, se pasa las hojas y las hojas pensando en sexo, con un lenguaje ordinario, soez y vulgar constante. El protagonista me recuerda al inspector Colombo, un tipo peculiar, que siempre anda por ahí dando vueltas cual gorrión, intentando robarte el pan, haciéndose incluso pesado, pero oye que da en el clavo.


Las peras del olmo de Octavio Paz.

 Básicamente lo que no se puede esperar de este libro. No entendí nada de nada, no estaba en verano para ensayos sobre autores que no conozco, pero de verdad que lo intenté y me lo leí enterito, menos mal que no era muy largo.